Inspirado por las palabras del ilustre físico William Thomson, quien afirmó que 'Lo que no se mide, no se puede mejorar', nos encontramos con una verdad fundamental: la medición es inherente a nuestra naturaleza. Ya sea de manera consciente o inconsciente, todos nosotros medimos constantemente. Y, partiendo de esta premisa, aplicamos esta sabiduría a nuestra operatividad, con el objetivo de mejorar la eficiencia al satisfacer las necesidades y requerimientos de tu empresa.